Navidad, 
Fin de Año, Reyes…a parte del trasfondo religioso, representa una época de 
reflexión, es una etapa de reencuentros, de vínculos afectivos y de valorar 
nuestros logros y fracasos
El 
nacimiento de Jesús es un símbolo de "nacimiento del hombre nuevo". Por ello es 
un momento de propósitos, de metas… que no siempre alcanzamos
 ¿Quién 
no desea el renacimiento de sí mismo como una persona nueva? una persona justa, 
responsable, comprometida, solidaria, ávida de conocimiento, valiente, dispuesta 
a cumplir sus logros, con madurez y voluntad 
¿Qué 
pasa que no lo alcanzamos? Nuestro progreso se ve lleno de obstáculos; el 
símbolo navideño se nos torna nostalgia y tristeza, se desmoronan nuestros 
propósitos y no llegamos a nuestras metas
LLenamos 
nuestros vacios existenciales con querer ser perfectos externamente, con 
obsesiones ridículas e intolerancias hacia los demás. Nos volvemos autómatas de 
nuestras obligaciones, siendo indiferentes, sin compromisos ni siquiera con 
nosotros mismos
Nos 
alejamos de esa nueva persona que debería "nacer" en Navidad
 No 
"cumplir" con nosotros mismos nos trae tristeza, que nos hace vivir estas fechas 
como una obligación más, sin sentimiento. Y perdemos la ocasión de disfrutar el 
momento, de la emoción del Amor que nos traen estos días
No 
"cumplir" con nosotros mismos nos trae tristeza, que nos hace vivir estas fechas 
como una obligación más, sin sentimiento. Y perdemos la ocasión de disfrutar el 
momento, de la emoción del Amor que nos traen estos días
Somos 
como marionetas de un teatro que siempre da la misma función, año tras año, 
Navidad tras Navidad
Si 
te sientes un personaje de esa obra teatral, si quieres salir de ese cuadro 
recurrente, la Psicoterapia Transpersonal te da las herramientas para que se 
produzca en ti ese nacimiento de una persona nueva
Conxita 
Gallardo
Psicoterapeuta 
Transpersonal /Teràpies Energètiques93.8757272 / 699401491
psicoterapiatrans@gmail.com
www.psicoterapiatrans.blogspot.com.es
 

 
No hay comentarios:
Publicar un comentario